Cumpliendo 94 años leal al Partido Comunista de China, el Ejército Popular de Liberación de China siempre sirve al pueblo a cualquier sacrificio

Coronel Superior Liu Yulai

Agregado de Defensa a la Embajada de la República Popular China en la República Bolivariana de Venezuela

A partir de su fundación hace 100 años, el Partido Comunista de China viene haciéndose cargo de la misión histórica de salvar la existencia de la nación, buscando constantemente cómo integrar estrechamente el marxismo a las grandes prácticas revolucionarias chinas.

El 1º de agosto del año 1927, bajo la sombría situación del revés histórico y de la represión sangrienta causada por el grupo antirrevolucionario de Jiang Jieshi que había robado los frutos revolucionarios del Partido nacionalista Guomingdang, a los 6 años de su nacimiento el Partido Comunista de China se vió obligado a fundar su propia fuerza armada de obreros y campesinos, antecesor del Ejército Popular de Liberación de China, y de allí se abrió el nuevo capítulo de la lucha armada del PCCh.

Gracias a esta decisión estratégica y a los grandiosos sacrificios de la fuerza armada revolucionaria, el PCCh había podido retomar la iniciativa en todas las posteriores luchas populares revolucionarias nacionales, antijaponesas y de liberación, estableciendo una tras otra base revolucionaria, realizando la Gran Marcha de más de 12 mil Kms., formando el espíritu de Yan’an, derrocando a los invasores japoneses y el grupo reaccionario de Jiang Jieshi apoyado por las potencias exteriores, a pesar de los armamentos y abastecimientos muy inferiores, hasta fundar la nueva China socialista. Posteriormente, frente a las inminentes amenazas de la superpotencia con un grupo de sus aliados, la República Popular China recién nacida heredera de una economía destruida, no dudó en demostrar la voluntad popular de defender la patria y mandó al Ejército Voluntario Popular Chino a contrarrestar la invasión a Corea dirigida por los EEUU. Después de sangrientos combates e incalculables sacrificios en una guerra asimétrica, el Ejército Voluntario Popular Chino junto con los combatientes de Corea del Norte, logró imponer a los EEUU firmar el Acuerdo de Armisticio de Corea.

Tanto los invasores japoneses y el grupo reaccionario de Jiang Jieshi como los EEUU y sus aliados de la entonces ONU que no reconocía a la nueva China, tenían una gran pregunta: “¿por qué no hemos podido con el ejército popular chino?”. La respuesta para ellos será un secreto que nunca van a llegar a comprender: Porque venimos del pueblo y para el pueblo, contando con el apoyo del pueblo. Tal vez este ejemplo pueda explicar todo: durante las guerras revolucionarias y en apoyo a Corea del Norte, solo el Presidente Mao Zedong había perdido 5 familiares, incluso esposa, hijo y hermanos, todos por la lucha revolucionaria; el último fue su hijo Mao Anying, quien falleció en un bombardeo de los EEUU en Corea del Norte. Al enterarse, Mao Zedong aguantó el dolor y dijo: “Siempre hay bajas en las guerras. El Ejército Voluntario Popular Chino ha entregado tantas vidas de mandos y combatientes, cuyas caídas son gloriosas. Ante esta situación, asuman que Anying es un combatiente normal, no lo tomen como un gran evento por ser mi hijo”.

Para orientarlo siempre en el correcto camino, el PCCh mantiene absoluta dirección sobre el ejército popular, y a la vez el ejército popular es leal al PCCh y al pueblo. Gracias a este ADN rojo que se hereda generación por generación y que nadie puede quebrantar, en los 94 años transcurridos, el EPL siempre ha luchado con alta disciplina y coraje por la grandiosa recuperación nacional y por el bien de su pueblo, así como por la estabilidad y la paz mundial. También, es capaz de corregir sus problemas tales como la corrupción. En las luchas contra los desastres como la pandemia del COVID-19, las inundaciones, los terremotos, etc., el EPL siempre ha respondido a la llamada del pueblo que le demande.

Como el PCCh y el EPL bajo su mando no tienen más intereses que los del pueblo, la República Popular China nunca ha caido en la carrera armamentista y nunca ha invadido a otro país. Sin embargo, el EPL está preparándose para cumplir las sagradas misiones de defender los éxitos del socialismo con la peculiaridad china en la nueva era y salvaguardar la paz mundial. Como el mundo todavía está lejos de gozar de la paz perpetua, cuya principal amenaza y desestabilizador es el hegemonismo, que se comporta de forma arrogante y humillante en sus políticas internacionales, sancionando y bloqueando frecuentemente con chantajes militares sin importarle causar lesa humanidad a otras naciones independientes que se atreven a no dejarse robar o a no rendirse frente su hegemonía, incluyendo intervención militar, asesinato o revolución de colores, aplicándolas cuando les parece. ¿Qué otras cosas podemos esperar de ellos? que tienen las manos manchadas de sangre de sus propios aborígenes y razas oprimidas. Por solo ser un país de paz que aboga por relaciones internacionales bajo principios de igualdad, beneficio mutuo y coexistencia pacífica, alzando la voz por los países en desarrollo, China ha recibido acusaciones y ataques injustos por los hegemones y sus aliados, por sus oficiales militares y por sus organizaciones subordinadas como la OTAN. Lamentamos que algunos países oportunistas se dejen utilizar para sintonizar las provocaciones agresivas hegemonistas contra China con pretextos de disputa territorial, democracia, derechos humanos, inclusive inventos de masacre en Xinjiang, hasta los asuntos absolutamente internos como los de Hongkong, Tíbet y Taiwán. Cabe destacar que cualquiera que sea su intento de desafiar la dignidad de las naciones soberanas, se frustrarán ante las verdades y será destruido frente al muro de acero de la voluntad firme de los pueblos; que lo sepan las fuerzas reaccionarias.

Últimamente, los EEUU sancionaron a las empresas chinas que ofrecen productos al EPL, con la misma lógica de que el complejo industrial-militar estadounidense controla las políticas de defensa en su país, la cual ha conducido a las guerras en Afganistán, Iraq, Libia y Siria, sin ofrecer ningún fundamento confiable, y está suscitando provocaciones en aguas nacionales soberanas, con la excusa de navegación libre. Hoy en día, la humanidad está amenazada por la pandemia del COVID-19 que requiere cooperación incondicional internacional, pero tristemente los EEUU y algunos países occidentales desean politizarla, y lo han hecho desde el inicio, asociados con la OMS, utilizando la investigación del origen del virus para atacar y culpar a China. Cuando no lo lograron, lo inventaron con su sistema de inteligencia, haciendo caso omiso a la llamada mundial de investigar al Fuerte Detrick. Por sus inherentes intereses al armamento bioquímico que se demostró en la derrota de Japón en la II Guerra Mundial, cuando no penalizó a los criminales de guerra japoneses, a cambio de sus armamentos bacteriológicos desarrollados contra China, con experimentos en cuerpos vivos, y sus repetidos empleos de armamentos bioquímicos en Corea, Vietnam, entre otros. Tenemos toda la razón de exigir esta investigación.

China y Venezuela son socios de cooperación estratégica integral, mantienen ejemplares relaciones bilaterales, rechazan contundentemente las injerencias externas y sanciones unilaterales, y se apegan firmemente a la Carta de la ONU, juntos con otros países soberanos e independientes. Apreciamos los esfuerzos del Gobierno y la FANB de Venezuela por la paz y estabilidad nacional y regional. Las relaciones amistosas entre el EPL de China y la FANB de Venezuela también siguen profundizándose. Últimamente se han estrechado mucho las cooperaciones en la lucha contra la pandemia de COVID-19, y actualmente los oficiales y soldados están en la ciudad de Korla, China, para participar en los Juegos Militares Internacionales, y a quienes les deseo el mejor de los éxitos.

Por último, quisiera aprovechar esta oportunidad para felicitar a los amigos venezolanos en el Año Bicentenario de la Patria de Bolívar y Chávez .